“MAJAR JODESH”
Este Shabat Kodesh, es la víspera de Rosh Jodesh Kislev, nos llegue para el bien y la bendición. Cuando ello ocurre, la Haftará elegida por nuestros sabios para leer durante este Shabat, no corresponde a ‘Toledot’, sino que acertadamente, ellos determinaron que leamos: “Majar Jodesh”, es decir, una Haftará que indica concretamente, la idea que ‘Mañana, es el Nuevo Mes’.
Para ello, nos regalan la despedida, emotiva y para siempre, de 2 seres humanos de excepción, que amaron la vida y la amistad, que lograron consumar la mitzvá de “amarás a tu prójimo como a ti mismo”… Yehonatán –hijo mayor del rey Shaúl- y David, quién sería el rey futuro de Israel.
Esta sentida Haftará, tomada del Libro de Shemuel I, Capítulo 20, versículos 18 al 42, nos presenta las circunstancias de la despedida entre dos amigos del alma – “Yedidé Nefesh”- que lo dieron todo para preservar esa fidelidad, que David supo guardar de por vida para con los descendientes de Yehonatán, el valiente hijo de un rey, que junto a su padre Shaúl, murieron en la última batalla contra los Filisteos, en el Monte Guilbó’a…
El último encuentro entre estos dos fieles amigos, cuya amistad superaba cualquier interés mezquino, fue precisamente en la antesala de un Rosh Jodesh. Aprendemos en la Haftará acerca de la importancia de este tiempo, que se celebraba con una comida festiva. La presencia de David en la corte del rey Shaúl era una costumbre para este tiempo. David, temeroso de Shaúl, quien había intentado ya atentar por 2 veces contra su vida, le ruega a Yehonatán “poder ausentarse” en esta ocasión, para comprobar, en la reacción del rey su verdadera intención. Por cierto David se habrá de esconder durante 3 días, a la espera de una señal, de un amigo, quien era como su hermano. La historia de ambos se habrá de separar para siempre. Pero el amor, el compromiso y la unión maravillosa de sus vidas, se habría de perpetuar a lo largo de la vida de David como rey…
¡¡Shabat Shalom uMeboraj!!
